martes, 14 de junio de 2011

Eva Mitocondrial

El tejano Spencer Wells es un antropólogo genetista especializado en dibujar el árbol genealógico de la humanidad. Estudió con el célebre fundador de la genética antropológica: Luigi Luca Cavalli-Sforza.

El Proyecto Genográfico, patrocinado por National Geographic está empeñado en dibujar las grandes rutas de evolución y emigración de nuestra especie, desde la Eva mitocondrial hasta hoy, tomando muestras de sangre y saliva por todas partes y antes de que la globalización acabe por mezclar todos los genes.

¿Quién fue Adán? En la página https://genographic.nationalgeographic.com/genographic/lan/es/atlas.html
se responde a esta pregunta. Adán fue nuestro antepasado común que vivió en África hace 60.000 años. Su cromosoma Y puede considerarse la raíz de nuestro árbol genealógico. Desde luego, no era el único hombre vivo en ese tiempo, y él mismo tuvo muchos antepasados, pero sus descendientes somos los únicos que vivimos en la actualidad. Todos los humanos presentes procedemos de ese ancestro.

¿Quién fue Eva? Nuestra "madre mitocondrial" vivió en las sabanas africanas hace 150.000 o 170.000 años, y es la única humana de aquella época cuyos descendientes siguen vivos hoy día. Mucho más tarde, hace 60.000 o 50.000 años, los descendientes de esos dos seres abandonaron África y se extendieron por toda la tierra.
En la página del Proyecto Genográfico puede usted, si lo desea, hacerse con un kit que le permitirá ver descodificado su ADN para así hallar su "haplogrupo" específico y trazar su árbol genealógico desde Adán y Eva, podrá participar así en el Proyecto Genográfico.
Sus páginas de historia ofrecen una buena síntesis didáctica, bastante realista y ecuánime. Véase por ejemplo lo relativo a la conquista "mora" de la península o la conquista española de América...
Este proyecto desvanece completamente el viejo concepto de raza y abole por tanto cualquier ideología racista, pues todas ellas carecen de fundamento científico, porque tras recolectar decenas de miles de muestras de sangre por todo el planeta y centenares de miles de muestras de saliva, lo evidente es que todos formamos "una gran familia", ya que somos más similares desde el punto de vista molecular de lo que imaginábamos, a pesar de nuestras diferencias culturales. Los datos genéticos confirman que todos los que vivimos descendemos como mucho de diez africanos. "Hace 50.000, aquel puñado de Homo sapiens escapó de la sequía causada por una glaciación y sobrevivió contra todo pronóstico"... 



En una entrevista con Spencer Wells, este confirma lo que ya intuiamos: que los vascos no son genéticamente distintos del resto de los españoles, sólo que tal vez fueron menos romanizados, pues el latin no se impuso del todo a su lengua perromana... ¡Los vascos son idénticos genéticamente al resto de los iberos, a pesar de los deseos o creencias de Arzalluz! La diferencia es cultural, no racial; discrecional, no necesaria. Y Sabino Arana se equivocaba fundamentalmente. No existen "las razas" y los prejuicios racistas son fundamentalmente erróneos: http://profesordeeso.blogspot.com/2007/07/entrevista-con-spencer-wells-genetista.html

2 comentarios:

  1. me he interesado por los estudios de Cavalli Sforza, esa historia paralela de las lenguas y los genes es interesantísima, y como al mismo tiempo los cambios culturales que afectan a las lenguas son más bruscos e inesperados que los de los genes.
    No es razonable ser racista, pero está claro que no suele ser la razón muchas veces la que guía a la humanidad. Y tendemos a fijarnos mucho más en las diferencias que en los que nos une, ser humanos. Hay que hacer un trabajo serio de reflexión con los alumnos en estos temas, porque el racismo es que como que lo trajeran de fábrica muchos de ellos,

    ResponderEliminar
  2. José Javier Villalba.
    Se ha intentado buscar el origen de las diferencias culturales en unas diferencias biológicas que se pretendían decisivas. Una vez desacreditadas todas las melonadas de los medidores de cráneos y de Rh, desaparece el barniz científico con el que los racistas han pretendido revestir la xenofobia de toda la vida.

    ResponderEliminar