“La escultura de sí” es una obra de ética y estética escrita
por Michel Onfray tras los pasos de Nietzsche. Hay que tomar esta
circunstancia, “tras los pasos”, de forma literal. Onfray viajó por Italia,
estuvo en Venecia, costa de Liguria, luego en Suiza, en Sils Maria en la Engandina. Visitó
casas, pueblos, montañas, lagos, bosques, rocas, lugares de inspiración del
filósofo. La coda del libro titulada “Cita bergamasca” describe las impresiones
de ese viaje.
Rescato unas palabras sobre tauromaquia, inesperadas en su
pluma. El torero figura estética y
ética.
“El torero ha de saber esperar la embestida con paciencia y
determinación. Cuando viene. No debe ceder a su impetuosidad. Finalmente, ante
la energía, debe mostrar su virtuosismo conduciendo al animal a donde debe ir:
“aguantar, parar y mandar”. Es necesario el equilibrio entre estas tres lógicas
para permitir a continuación los gestos que, del adorno al castigo, provocarán
la emoción. En todas las fases de la danza con la muerte, el matador se convertirá
en demiurgo, engendrador de agudezas y densidades estéticas. Como en el trabajo
del domador, hay que someter una energía rebelde a las reglas del arte. El
hombre ético se encuentra en esa misma situación: reducir los flujos a formas
elegantes. Hacer un mundo a partir del caos.”
Voy a seleccionar la parte dedicada a los artistas
contemporáneos, puesto que me resulta difícil relacionarlos con la “humana
escultura de sí” y es la parte que más me ha sorprendido. Pero hay un canto a
la amistad, unas páginas espléndidas dedicadas a la cortesía, a la necesidad de
unas relaciones humanas de “lejanía cercanía” que merecerían comentario aparte.
Yavé, Pigmalion, los ángeles gnósticos y los anónimos de la
historia y la prehistoria africana representan a los artistas tradicionales. Todos
ellos han esculpido, entre mito y realidad, expresando el misterio o capturando
la vida, fijando el dinamismo.
La Fuente de Duchamp |
Desde DUCHAMP se trata de abrir las ventanas, de cambiar de
aires y de abandonar los viejos hábitos. No hay moral contemporánea que no tome
en consideración el trabajo de este ingeniero del tiempo perdido, como le
gustaba llamarse. No hay ética estética si se silencia a los herederos de Dadá.
Contra el nihilismo la reflexión sobre el arte es importante
rica y prometedora. Tendríamos que acudir a Tinguely, Nono, Pollock, Scelsi,
Dubuffet y Cage. O bien puesto que están trabajando todavía a Kounellis, Long o
Metz que pertenecen a lo que después de BEUYS podemos llamar ensanchamiento del
arte.
Beuys, escultor hasta en sus acciones, performances.
Revolucionó el estatuto de la actividad liberándola de marcos, fue un ejemplo
de la tradición de la práctica escultórica, informar la materia y obligarla a
parir formas. De el uso que hace de la cera o de la grasa, BEUYS aviador de la Luftwaffe, abatido en el
frente ruso, debe su salvación a las mantas en que es envuelto y a la grasa con
la que cubrió sus heridas. ¿Por qué ennoblece la grasa? Representa la riqueza,
el exceso, la abundancia, material emblemático del embarazo y del nacimiento.
Sustancia mágica: a la grasa de los ahorcados se le atribuyen poderes
curativos. Material plástico por excelencia, toma fácil las formas, se esculpe
con un hilo, con un dedo, se informa a sí misma con las variaciones de
temperatura, se funde, se solidifica según las variaciones climáticas.
la grasa de Beuys |
Ya no son
las canteras las que dan el material, sino el cuerpo humano, las cavernas más
oscuras, lo más recóndito de las entrañas. Igualmente habría que hablar del
fieltro, el pelo, la “merda” de Manzoni, los cráneos de Tinguely. El polen de
Wolfgang Leb, las moscas de Fabrice Hybert.
Wolfgang Lab trabajando con polen |
Los aduaneros americanos negaron derecho de entrada a "Oiseau
dans l’espace" de Brancusi, no era figurativa. Brancusi no la había hecho para
mostrar un pájaro en vuelo sino para mostrar la figura que suscita en el alama
del artista el recuerdo de un pájaro en vuelo. Desde Boccioni, Balla y
Sevirini, Muybridge, el movimiento no se representa de manera estática.
Esculpir un pájaro en el espacio no implica ensayar la imagen figurativa del animal
sino ir hacia la quintaesencia de una dinámica, depurada y expresada con la
economía más absoluta para que sólo quede lo esencial.
Oiseau dans l'espace de Brancusi |
Brancusi puso un pleito y tuvo que esperar 3 años para que
un tribunal fallara que Oiseau dans l’espace no tenía fines utilitarios sino
que era una obra de arte.
De Praxíteles a Carpeaux las cosas no cambiaron mucho: el
arte representaba figurativamente la realidad.
Llegó Gaugin con sus nuevas formas tomadas del arte de
Oceanía. Luego las maderas talladas de los expresionistas alemanes, Picasso con
sus collages de elementos naturales. La escultura clásica se hizo imposible,
zozobra en lo vulgar mientras van saliendo las nuevas potencialidades. El
antiguo orden se pulveriza, las sustancias nobles son sustituidas por otras a
menudo provocadoras, se trabaja con materiales simples, sucios, vulgares, neutros, con objetos
deformados, reciclados, rotos, quemados…Es más cansado e inquietante y existe
el riesgo de perderse, todo está permitido. No importa si se infiltran dos o tres
falsarios, más vale este desorden que los circuitos balizados
Durante mucho tiempo el arte ha estado al servicio de las
grandes mitologías que reinaban efectivamente. Llegó la hora de un arte sin
museo, dinámico , voluntario, proclive a las extravagancias y desbarajustes.
La versión idealista del arte contemporáneo es como una
reactualización de la teología negativa, esconder para mostrar mejor, callar
para decir mejor. Cuando se busca un sentido no lo hay. La obra es laberinto
necesita discurso, hace opaco el mensaje y se interpone entre la idea y el espectador. Las obras de BUREN o Carl
ANDRÉ sólo tienen sentido por los discursos que las preceden. Lo sensible, como
en Platón, sólo tiene sentido cuando se sabe que participa de lo inteligible.
No hay materia sin una idea que la justifique
Obra de Daniel Buren, artista conceptual |
Pero no hay idea pura, siempre hace falta un apoyo incluso
reducido al mínimo para acceder a los conceptos. Estos se evaporan si no tienen
materia que los induzca. Y a pesar de la mayoría de los artistas que no quieren
que se hable de belleza delante de sus creaciones, hay obras que no dejan de
producir efectos en la retina y efectos hedonistas. Daniel BUREN planteó esta
paradoja.
Minimalismo de Carl André |
Luego hay un arte menos fascinado por el nihilismo y la
escasez, atiende a la parte maldita, a las sombras y excesos. La energía le
acompaña, pretende más la expansión que el agotamiento. Su movimiento es
centrípeto. El arte minimalista
practica la espiral que dirige al centro. El body art lleva el trayecto contrario, busca la salida. El primero
quiere la extinción, pero deja huella, el segundo deja huella pero ésta no
dura.
Bodyart |
El arte, el espacio estético son lugares para experiencias
que no son pura ni simplemente reproductibles en lo real, pero que pueden
alimentarse de las incidencias que éste habría podido producir. Lo real al
completo se considera un material del que hay que extraer las formas. El
instrumento de esta operación es el querer del artista.
Naumaquia |
Los ancestros de estas situaciones construidas están
lejos: naumaquias practicadas en el Coliseo, las escenas en el desierto, las
selvas simuladas. O las fiestas romanas con sus desconsiderados despilfarros.
Los espectáculos en el Gran Circo Romano, cuando desfilaban 10.000 animales
destinados a combates donde morirían la mitad.En el Renacimiento Bernini
resucitó las naumaquias.
Grimod de la
Reynière cursó la invitación al banquete de su funeral y no
reveló la surpechería hasta que acabó la cena. Las acciones subversivas de los
surrealistas.
La situación construida le interesa más cuando es producto
de un ser singular. Johanes Baader anunciando la buena nueva de la salvación a
través del dadaísmo en la catedral de Berlín. Noviembre de 1918. Justo después
del armisticio.
Marcel Duchamp en 1919 que se hizo rapar el cuero cabelludo
y le quedó una tonsura en forma de estrella fugaz.
Los situacionistas después de la posguerra formularon el
principio de construcción de situaciones. Dieron forma en la vida cotidiana a
la confusión ética y estética. Había que promover lo efímero, lo único, la obra
gratuita, el puro gasto. El gesto, la situación, e momento construido
establecen una relación particular con el tiempo.
Los situacionistas tenían otra visión del tiempo y del
espacio, de la arquitectura y del urbanismo. Es la lógica querida por DEBORD y
compañeros, el kairós, hacer en el
momento oportuno.
Contra la división de tareas, maestro que sabe y muestra y
esclavo que ignora y observa la subversión consistió en darle al espectador un
papel creador.
Los situacionistas querían disminuir el número de espectadores,
hasta extinguirlo y aumentar la cantidad de vividores, los practicantes. Son
escultores de oportunidades, modeladores de las formas que toman las relaciones
entre individualidades.
Allan KRAPROW propicia el encuentro entre ciertas prácticas
singulares y la palabra que las designa: happening.
Pretende mezclar arte, vida cotidiana, mundo de todos los días y uno mismo. Los
límites entre vida y arte se vuelven imprecisos. Cada uno es ascendido a
artista, por ser experimentador.
En el Black Mountain Collage crea un taller de
experimentación del arte de la persona viva. Confianza en el instante, la
invención, el instinto, el deseo, rechazo de las predeterminaciones. Primacía
del capricho, de la fantasía.
Performance de Kraprow |
Evolucionará hacia una radicalización. Después de JOHN CAGE
y las extravagancias de FLUXUS se hablará de event para caracterizar las
acciones breves, queridas como distintas pero integradas en la vida cotidiana
más elemental. . Cada momento de una existencia banal se carga de densidad
artística: beber agua, cerrar una puerta…las instantáneas expresan la
naturaleza idiota, sin doble, de lo
real. El arte fuera del museo es más auténtico en la calle.
Quatour Helios interpretando "works for precussion" de John Cage |
Los artistas del accionismo
vienés y los del body art son los
padres de estas prácticas teatrales. Son como una reactualización del gesto
cínico antiguo; aquellas acciones no vergonzosas por naturales que dicen
Diógenes realizaba en la plaza para escándalo de todo ciudadano decente. Onfray
los considera remedios contra el nihilismo de nuestra época y su apoltronamiento
en el cinismo vulgar.
Fluxus |
Un teatro de la
crueldad que permita el despertar de nervios y corazones. La acción llevada
al extremo, es lo que definía la crueldad para ARTAUD. Mordedura concreta, convulsiones que sacudan e informe el
entendimiento, al querer involucrar carne y nervios, Artaud pretende eliminar
el sometimiento de la inteligencia al lenguaje. Hay que liberar sueños,
obsesiones, dejar vía libre a las quimeras, querer la utopía y someter la vida
a ese ideal de un lugar otro entre la imaginación y los acontecimientos.
Torbellino revelador de un cuerpo que puede convertirse en signo. Son las líneas de actuación de los
situacionistas vieneses. Y después los artistas implicarán sus cuerpos en
performances que inquietan, desestabilizan, implican.
Toda esta estética tiene un sentido ético, cada situación
construida es productora de un estilo que a su vez da consistencia. El edficio
de la propia figura se construye en el tiempo. Baudelaire habla de un espejo en
el que vemos la imagen del efecto producido para corregir imperfecciones,
fracasos. La parte significa el conjunto, el Condotiero, figura moral en la que
se inspira todo el libro, dota a CADA INSTANTE DE DENSIDAD. Todo tiene sentido
nada es inocente.
Deformamos y abusamos del lenguaje, usamos las palabras para
enmascarar la acción, nuestras palabras dicen lo contrario de lo que hacemos. Las
palabras dicen una cosa y los actos lo contrario.
Panofsky ha demostrado cuántos elementos aparentemente
dispersos podrían significar lo mismo, la catedral y su arquitectura remiten al
pensamiento escolástico y a la construcción de sumas teológicas. Una trama de
hilos entreverados asocia a figuras que surgen en ámbitos inconexos. Hay una
relación entre la experiencia estética de los años 1960-70 y la posibilidad de una nueva ética
poscristiana.
Acciones, happenings, events, performances. La ascesis
personal es necesaria para fabricarse una identidad: los cínicos quieren la vía
corta pero escarpada, Los estoicos la vía larga, menos ruda. Padecer frío,
calor extremo, vivir a la intemperie, soportar la privación de comida y bebida.
Los artistas del body art y los situacionistas han ilustrado
el objetivo cínico antiguo al intimar al cuerpo a que expresara el sentido del
sufrimiento, la herida, la cicatriz: ingestión de carne descompuesta, leche
derramada por el suelo y lamida, equilibrio sobre el alféizar de una ventana a
varios metros de altura como Gina PANE,
Michel Journiac, fabrica y distirbuye morcilla hecha con su sangre |
fabricación
de la morcilla humana,
interpretación de la relación incestuosa en el caso de Michel JOURNAC,
sacrificios de animales, teatralización pagana de prácticas orgiásticas
en el
caso de HERMANN NITSCH, exhibicionismo sexual, defecaciones públicas y
ondinismo de Gunther BRUSS, escenografías de la crueldad, evisceraciones
catárticas en Rudolf Schwarzkogler.
Arte con el cuerpo de Gina PANE |
Todos estos artistas transfiguran la ética artística al
modificar el soporte estético. Proponen
una vuelta a la inmanencia y consideran carne y cuerpo como materia por
excelencia. La escultura de sí tiene sentido. Estos artistas quieren inscribir
la voluntad en el organismo, plegar el cuerpo según la línea de un querer
experimental. Las situaciones estéticas deben entenderse como ensayos de
prácticas inaugurales que persiguen el ensayo de nuevas maneras de percibir el
cuerpo.
Gunther BRUSS |
Catarsis, sublimación , juego, provocación, tragedia se
interpretan como variaciones sobre el tema kynico
en la época contemporánea. Pueden leerse como momentos negativos de una
dialéctica cuya síntesis propondría lo solar allí donde reinan las tinieblas.
Rudolf Schwarzkogler |
Los artistas hacen posible la emergencia de sí como entidad
de susceptible de información estética y por tanto ética. Señalan una
modernidad que definiría el desbordamiento del arte en la vida: con ellos se
dicen las vidas estéticas y la estatización de la vida, la existencia artística
y el arte de la existencia. Su práctica es una Aufhebung de la definición clásica de escultura: producir formas,
estructurar un caos, expresar una fuerza en acto.
Accionismo vienés |
¿Qué debemos a los artistas del cuerpo transfigurado? El
gesto que esculpe el cuerpo, la voluntad que produce situaciones, las actitudes
que se convierten en formas, la acción transformadora en espectáculo, la vida
contenida en figura, la virtuosidad expresada en instantes quintaesenciados, el
kairós captado en su densidad. Algo
que, cuando se pretende esculpir el propio yo, habla de la necesidad de poner
en marcha una mayéutica dirigida a la producción de la obra, la emergencia de
un estilo, una arquitectura de sí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario